Aguas Andinas está dando prioridad a los objetivos basados en datos que reduzcan sus emisiones en los tres ámbitos del carbono.
Aguas Andinas, que gestiona agua y aguas residuales a la capital, Santiago, está explorando todas las vías para ser más sostenible. Esto incluye la compra de energía renovable y la reducción del consumo energético.
Aguas Andinas ha logrado reducir sus emisiones en un 25%.
Establecer objetivos realistas basados en datos y adoptar estrategias a medida puede ayudar a las empresas de servicios públicos a progresar. Antes de fijar objetivos netos cero, Aguas Andinas está desarrollando un mejor conocimiento de las emisiones de sus procesos mediante la instalación de sensores para medirlas.
La empresa utiliza los datos para optimizar el control de los procesos y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
“Un clima más duro presenta riesgos inmediatos frente a los que debemos ser resilientes, pero el riesgo a largo plazo es que, sin mitigación de GEI, nuestro clima sólo se volverá más hostil”, - Felipe Sánchez, gerente de sostenibilidad de Aguas Andinas.
Aguas Andinas ha trazado planes pragmáticos de descarbonización, centrándose en alcanzar sus objetivos para 2030 antes de comprometerse con el objetivo de cero emisiones netas. La empresa se responsabiliza con un enfoque basado en datos para seguir los progresos.
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Ya se han reducido las emisiones en los tres ámbitos en un 25% -
Reducción del 54% de las emisiones de Scope 1 y Scope 2 para 2030 -
Reducción del 16% de las emisiones de Scope 3 para 2030
