Para el tratamiento de aguas residuales municipales, usted necesita más que tan solo equipos. Necesitas soluciones.
Tratamiento de aguas residuales. En cierto sentido, nada podría ser más básico. Al aprovechar los elementos que emplea la naturaleza para limpiar ríos y arroyos (aire, microbios, gravedad, luz), el sector de las aguas residuales ha revolucionado el saneamiento y ha traído salud a sus comunidades, ríos, arroyos, lagos y océanos.
Pero la demanda actual es de todo menos básica. Todo el mundo debe hacer más con menos. Para mantener las tarifas asequibles, las centrales necesitan trabajar con menos financiación, menos personal, menos espacio, menos consumo energético... Se debe hacer más: se necesita más tratamiento a medida que aumenta la lista de parámetros de descarga. DOB, STS, DQO, coliformes fecales, sí. Pero también nitrógeno, fósforo, metales, otros patógenos y previsiblemente pronto, residuos farmacéuticos.
Los sistemas más antiguos necesitan sustituir y modernizar sus equipos originales. Al mismo tiempo, las compañías se enfrentan al reto de tratar de una forma más inteligente, de comprimir más tratamiento en el mismo espacio, de reducir el consumo energético y de añadir procesos avanzados. Las plantas más nuevas deben predecir el futuro, planificar la capacidad de ampliación con límites más estrictos.
Cuando el agua sale de la planta, ya no es agua residual sino un recurso extraordinariamente valioso. Está lista para su reutilización, a veces directamente por usuarios, industrias, potabilizadoras o por el propio ecosistema que depende del agua para su propia supervivencia
