Eliminación de contaminantes

A medida que la lista de contaminantes crece y los límites se vuelven más restrictivos, el tratamiento de aguas y aguas residuales se hace más complejo. Metales, compuestos orgánicos volátiles, nutrientes, toxicidad, pesticidas, virus, bacterias, componentes de sabor y olor, y la lista continúa. La lista de contaminantes de interés emergente (CEC, por sus siglas en inglés) aún no regulados, como los productos farmacéuticos y los productos para el cuidado personal, también crece, lo que complica las proyecciones de las necesidades futuras.

Hoy más que nunca, cada gota cuenta. La expansión de la población y la industrialización siguen aumentando la demanda de agua potable segura para el consumo humano; la agricultura, las empresas y la industria, agotan las reservas de agua dulce y aumentan la generación de aguas residuales. Muchos gobiernos, empresas de servicios públicos e industrias están centrándose en la reutilización del agua de mar o de las aguas residuales para ayudar a satisfacer la demanda, lo que añade aún más contaminantes a la lista de eliminación del tratamiento de aguas.

Ya sea para uso potable, uso industrial, tratamiento de aguas residuales domésticas o industriales, o bien para reutilización, entender todo lo relacionado con los contaminantes es fundamental para determinar el mejor tratamiento. La necesidad de disponer de un tratamiento de aguas y aguas residuales que sea rentable y eficaz desde el punto de vista energético nunca ha sido tan grande ni tan compleja.